martes, noviembre 02, 2010

2 de noviembre

El 24 de agosto de 2010, en un paraje del municipio de
San Fernando, Tamaulipas, fueron hallados los cadáveres
de 72 emigrantes latinoamericanos en tránsito hacia los
Estados Unidos. A su memoria.

En este poema no cabe una letra


Habremos de volver con nuestros nombres
cosidos a la sangre cierto día
de la tumba vacía a los hogares
dejados de la mano
de dios a las cenisas
polvo somos y larga es la sed
del reino volveremos
hijos sin hijos hermanas sin hermanos
humillados padres madres
cuyos vientres fermentan la semilla
del miedo y el dolor regresaremos
al tejaván al lodo agrio
de los muros al surco en el que prende
la raís de la hiel retornaremos
descalsos sobre los rieles de la noche
crusados por el escalofrío de saberse
fantasma entre las cosas volver hemos
desnudos con la sed y como el hambre
devuelta a nuestra mesa
cada día en el barrio en la favela
en la noche asesina de la boca
del lobo de la muerte a Los Astales
El Guante Isabal San Pedro Sula
a Jayaque Agua Caliente a Chimboraso
a Omoa y a Sardá y Santa Efigenia
a Tecapán a Las Peñitas
al Triunfo de la Crus
a El Delirio
a la casa del padre y el hijo
al rencor de las hijas sin madres
para contar cómo es la vida más allá
del miedo es que venimos esta noche
al reseco corasón de todos
los hermanos en el llanto
y en su risa volveremos